En esta clase, se explorará cómo la Ilustración influyó en el proceso de secularización en Europa durante el siglo XVIII, un cambio profundo que transformó la relación entre la religión y la vida pública. La secularización fue impulsada por varias causas clave: el avance del pensamiento racionalista, que priorizaba la razón sobre la fe; la crítica a la autoridad religiosa, que cuestionaba el poder y la influencia de la Iglesia en la sociedad; la difusión de ideas ilustradas, que promovían valores como la libertad de pensamiento y la tolerancia; y los conflictos religiosos que, durante siglos, habían generado divisiones profundas en Europa. Se analizará cómo estos factores convergieron para debilitar el control de la religión sobre las esferas política y social, dando paso a un entorno en el que la razón y la evidencia comenzaron a ocupar un lugar central en la organización del conocimiento y la vida pública.